El mundo del correo postal se ha ido modernizando, existen diferentes opciones para enviar una carta: envío ordinario, envío urgente y el envío online.
Enviar una carta es muy sencillo, para hacer el envío de una carta ordinaria tanto nacional como internacional, el remitente deberá escribir la carta, posteriormente introducirla en el sobre adecuado y rellenar en el exterior del sobre los datos y domicilio, tanto los propios como los del destinatario.
El envío online de cartas es un servicio que ofrece Correos para el envío de documentación o comunicaciones pero que facilita el proceso de envío. El remitente simplemente tendrá que enviar de forma online los documentos a enviar y posteriormente estos documentos serán depositados en el buzón del destinatario.
Para el envío de una carta ordinaria se necesita el sobre de un tamaño suficiente para contener la carta que se quiere enviar, la dirección completa del destinatario y los sellos por el valor del envío. El peso máximo aceptado es de 2 Kg.
Los datos del destinatario deben ir situados en la parte delantera del sobre y, los datos del remitente en la parte trasera. Para evitar problemas en la entrega, es muy importante rellenar la dirección completa del destinatario, sin olvidar el código postal.
Si no se pudiera entregar la carta porque la dirección del destinataria es errónea o esta incompleta, la carta se suele devolver a la dirección del remitente.
Para enviar una carta ordinaria hay dos opciones, comprar sellos e introducir la carta con los sellos en uno de los buzones de los que dispone Correos por la calle o bien, acercarse a una oficina de Correos.
El servicio de carta ordinaria está disponible para envíos nacionales e internacionales:
La carta urgente se diferencia de la carta ordinaria en los plazos de entrega y en la posibilidad de saber cuándo se ha entregado la carta.
La carta urgente se entrega en el buzón, no se entrega en mano, pero con el número del envío a través de la web de Correos se puede conocer si la carta ha sido entregada. El peso máximo admitido, al igual que en las cartas ordinarias, es de 2 Kg.
Como su nombre indica, se trata de un envío urgente, por tanto, los plazos de entrega son menores.
El envío de una carta urgente solo se podrá hacer desde una oficina. Las cartas que sean depositas antes de las 16h serán tramitadas con fecha de ese día, después de las 16h se tramitarán al día siguiente.
Los plazos de entrega para los envíos nacionales e internacionales son los siguientes:
Al igual que las nuevas tecnologías han ido avanzando, han ido surgiendo mejoras para enviar cartas de una manera más sencilla. Con el servicio de carta digital no tendrás que moverte de casa para enviarla, simplemente necesitarás un dispositivo con conexión a internet. A través de la página web de Correos podrás enviar cartas, que llegarán al destinatario de forma física, es decir, recibirá la carta en su buzón, no vía online.
El proceso es muy sencillo: acceder a la página web de Correos, seleccionar el envío de carta online, escribir el contenido, que podrás hacerlo directamente a través del ordenador, o bien, escribiéndolo a mano y escaneándolo posteriormente, indicar los datos del remitente y destinatario y realizar el pago.
El destinatario recibirá la carta de forma física, es decir, Correos se encargará de imprimir la carta y entregársela en el buzón al destinatario.
Una de las grandes diferencias entre la carta ordinaria y la carta certificada es la capacidad para poder hacer un seguimiento del envío de la carta. La carta ordinaria, a diferencia de la carta certificada, no cuenta con ningún número de seguimiento para poder saber dónde es la carta en cada momento. La ausencia de este y otros tipos de servicios adicionales asociados, abarata el coste del envío.
Antiguamente la población utilizaba el envío de cartas para comunicarse, hoy en día es algo que, aunque no esté de moda se puede seguir haciendo, porque a todo el mundo le hace ilusión recibir una carta inesperada de un ser querido, además, a diferencia de las nuevas tecnologías las cartas son una manera de guardar un recuerdo.
Los envíos de cartas ordinarias a un familiar, un amigo o conocido es algo que se ha visto sustituido poco a poco a lo largo de los años por las nuevas tecnologías.
Se trata de un acto bonito y que actualmente nadie espera, por lo que crearás en el destinatario un factor sorpresa, además, es una manera de recordar como se comunicaba antiguamente la población.